domingo, 25 de diciembre de 2011

Curiosidades de la Navidad

 Antes de empezar, quiero que conste en acta que no procuro cortarle el punto a nadie, ni hacer la puñeta. Que cada uno crea lo que quiera y como quiera; yo sólo me dedico a dar datos que los estudiosos del tema han hecho público sin que se líe parda. Sólo explicaré ciertas cosas curiosas, sobre todo de origen pagano, que forman parte de nuestras fiestas, y que hoy tenemos asociado a estas entrañables fechas, y al cristianismo. De modo muy resumido hay que decir, que la religión cristiana, en general, da igual, católicos, ortodoxos, o protestantes, se caracteriza por tener un gran eclecticismo en el cual ha radicado su éxito. La habilidad de los misioneros, y seguidores de Jesús a lo largo de la historia, ha sido la de adaptar las costumbres locales de cada nación a las fiestas y ritos cristianos. Baste como ejemplo, el caso de Hispanoamérica, donde, los ritos católicos se mezclan con los de los antiguos mayas o aztecas. En el caso nuestro, el europeo, el mestizaje de costumbres vienen dados por los antiguos pobladores de nuestro continente, íberos, romanos y celtas, en el caso español; y a un nivel más cosmopolita, de los antiguos pueblos germánicos, egipcios y griegos, de los que tenemos todos europeos occidentales una importante herencia, aunque nunca comparable con la romana. Empezaré aquí a enumerar las costumbres a modo de inventario, como es mi costumbre:

  - Empezaremos por las dos últimas en llegar: el árbol de Navidad, y Papá Noel. El primero procede de una tradición puramente germánica, de la Alemania más profunda, donde los bosques de abetos blancos son, o eran, al menos, abundantes. Hay que decir que los teutones tienen por costumbre poner éstos árboles de adornos en dos fiestas concretas en muy corto espacio de tiempo: el día de los difuntos, donde en algunas zonas, se coloca, al lado de la tumba del ser querido; y en Navidad, una tradición, que iba de capa caída, hasta que el cristiano lo adoptó como suyo; el mundo comercial, y el cine hizo el resto. En el caso de Papá Noel, también es de procedencia alemana, pero cosa curiosa, nunca iba de rojo, sino de verde (o eso creo), hasta que un anuncio de Coca Cola (siento hacer publicidad) lo mostró tal como lo conocemos hoy día. Desde entonces se ha quedado así para el resto, aunque habrá que preguntar a los alemanes como lo siguen vistiendo. Éste es un caso claro de quien manda en el mundo: el dinero.

  - De pocos es sabido que Jesucristo nació antes de Jesucristo, en concreto unos seis o cuatro años antes, según cada autor, cambia la fecha.  Se basan para ello en el pasaje de la matanza de los inocentes causada por el rey Herodes "El Grande", quien murió unos seis años antes de la teórica venida de Jesús. La causa de la equivocación fue por un monje, que fue el encargado, por parte del Papa (no me acuerdo quien, ni en que época, salvo que fue en la Edad Media), cuyos cálculos estaban más equivocados que los del contable de Lehman Brothers. El caso es que se dieron cuenta del error, pero tarde, y ya para cambiar todo, es mejor dejarlo como ésta. Así pues, según ésta consideración, deberíamos estar en el año 2.017 o 2.018 (según cuando se lea).

 - Tampoco está claro que naciera en 25 de diciembre, sino en primavera o verano, ya que según algunos autores, cuando el ángel fue a anunciar la buena nueva, los pastores se encontraban durmiendo al raso, una práctica, que evidentemente, en pleno invierno no se hacía. La cuestión de la fecha actual, fue precisamente, para adaptarla a las costumbres y ritos paganos, que había en Europa, donde lo que se celebraba era el solsticio de invierno, al igual que las hogueras de San Juan son en el solsticio de verano; así pues, se adaptaron ambas fiestas con el hijo de Dios en el primer caso, y con el principal profeta, en el caso del segundo.

  - En el caso de las famosas uvas de fin de año, que todos tomamos como una tradición milenaria, lo cierto es que su origen es de principios del siglo XX, cuando en plena crisis (siempre hay una), hubo un excedente de uvas que no se pudo vender, el caso es, que los vinateros supieron vender éste material sobrante como una gracia para cada campanada, y ellos son los culpables de todos los atragantamientos que hay desde entonces, y de que Ramón García presente todos los años las campanadas. Así pues tenemos otro ejemplo, de como en todas las épocas, el márketing al final nos endosa, por narices, una cosa que no necesitamos.
  - Curioso también es el caso de los Reyes Magos, pues en la Biblia, no mencionan que son magos, sólo que proceden de oriente. Ni sus nombres, ni descripciones, ni siquiera el número, que hoy tomamos por tres; tampoco se nombran los famosos regalos: incienso, mirra y oro. Todo es una tradición oral, venida, al parecer, de un evangelio apócrifo (no admitido por la Iglesia), que cuenta parte de lo dicho, pero no todo; el resto, como dije, se debe a una tradición de boca a boca. Según algunos, éstos, en realidad, en vez de reyes, eran astrónomos mesopotámicos, que venían siguiendo la estrella de Belén, la cual también se pone en duda. Pues aunque se han intentado explicar, que fue un cometa, o una conjunción planetaria (al más puro estilo de Pajín), lo cierto, es que las tesis más escépticas explican que ésto es otra tradición tomada de otra religión, como en muchos casos, más concretamente de la egipcia, cuya influencia en Israel era más que notable, de ello se basan en la historia del rey Tutankhamon, cuyas similitudes con el caso de Cristo asombran. Pues ambos fueron recibidos por una estrella, y murieron y resucitaron al tercer día. Hay que decir, que era muy común en la época, adornar los nacimientos de grandes personajes con una estrella, como también pasó con Alejandro Magno.

- Otro dato interesante, es el del orígen de los belenes tradicionales, que compartimos italianos y españoles. Su procedencia es del país transalpino, cuya autoría corresponde a San Francisco de Asís. Ésta costumbre fue traída a España por el rey Carlos III (VII de Nápoles), allá por el siglo XVIII.

- Aunque fuera de la temática de la Navidad, pero relacionada con lo que estamos hablando, está los orígenes de la iglesia cristiana, cuyas primeras costumbres provienen sobre todo, del mundo helénico y egipcio, pues fueron sus primeras áreas de expansión. Aunque hoy asociamos la iglesia con el Vaticano, lo cierto es que en la antigüedad hubo varias sedes principales: Alejandría, que era la más importante entonces, Roma, Jerusalen, Constantinopla y Antioquía (ciudad griega en la costa de la actual Turquía). Tpdas, menos Roma, acabaron en manos musulmanas en la Edad Media, por ello el Vaticano es, actualmente, la sede más importante.

- Ahora sí, le voy a cortar el rollo a algunos. A todos nos gusta el marisco por éstas fechas, en las que el ácido úrico llega a alcanzar cantidades del tamaño del Guadalquivir. Sin embargo, entre los primeros cristianos estaba prohibido comer marisco. Pero no se asusten, todo tiene su lógica, en aquella época no había frigoríficos, y la mitad de éste manjar llegaba en mal estado, creando problemas de salud entre la población. Por ello las autoridades del momento decidieron prohibirlo, menos mal que nadie le hizo caso, porque sino aún sería pecado comer las gambitas blancas del Golfo de Cádiz.

- Y por último dos curiosidades de nuestra tierra, de todos es sabido que la tradición cuenta que Santiago (al menos en cuerpo yacente) estuvo por el norte de España. Pero de pocos es conocido que hay otra, que cuenta que Pablo predicó en nuestra tierra, Andalucía, que fue la primera en cristianizarse en Hispania, por ello en muchos lugares de Sevilla existe la advocación de San Pablo. La otra es algo más moderna, y es para aquellos gaditanos que se quejan de que en su ciudad no hay ferias, a pesar de que nunca a ido a la Velada de los Ángeles. Hubo en Cádiz, sobre todo entre el siglo XIX y mediados del XX, una feria del frío, que venía a coincidir con la Navidad, en ella había casetas de tiro, tiovivos, etc.

 Espero, pese a ser tópico, que pasen unas felices fiestas, y sobre todo que lo pasen con quien merezca más la pena. Creo, a mi entender, que me la entrada es algo larga; aunque para algunos, no le cuente nada nuevo, y que haya rascado poco, y para otros sean datos irrelevantes, pues su fe es más importante. Hay que decir que sea, cual sea su idea, tanto de los datos, como del artículo, lo más importante del mensaje navideño, ese que dejó Jesucristo, no sólo para éstas fechas, sino para todo el año: el amor al prójimo. Algo que ninguno cumplimos...y menos cuando conducimos. Un saludo desde el sur.

Calle iluminada en Navidad.

domingo, 11 de diciembre de 2011

El pitufo caleti

  
  Creo que no es novedad decir que soy un mitómano de los dibujos antiguos, pues aunque ya no los veo, porque entre otras cosas, pueden decepcionarte después de tantos años, creo, por lógica, que quien simplemente vea la foto de mi perfil en éste blog, sabrá, sin conocerme, que siempre he simpatizado por éstos simpáticos enanos azules (aunque realmente soy un fanático de los Simpsons). Mi apodo de pitufo gruñón no se debió nunca a mi estatura precisamente, sino al mal genio que siempre me caracterizó, convertido en mala ostia e ironía en mi adultez. También es de sobra conocido, y sólo hace falta observar levemente mi blog, el cariño que siento por la tierra que me vio nacer; y de ello nace la unión del personaje ficticio que he inventado para éste artículo, y propongo que lo vendan en las tiendas de todo a cien, o en la promoción de algún diario deportivo insulso en contenidos, como los que abundan en España; me refiero al Pitufo Caleti.

  Dicho personaje es el único pitufo gordo de Pitufilandia, y su vestimenta consiste en una camiseta del Cádiz, que siempre luce en sus viajes, y que figura en sus fotos de Facebook, en las que sale con sus colegas, el pitufo Bromista, el pitufo Jartible o el pitufo Chirlachi entre otros; y de ella presume, orgulloso, con las pirámides de fondo, la Torre Eiffel, el Big Ben o la madre que lo parió. También se viste con un bañador estampado, de flores, al modo hawaiano, un gorro y una caña de pescar, además de unas chanclas tipo romano, de plástico, compradas en un todo a cien. En invierno, cuando el rasca hace acto de su presencia, se abriga con un chaquetón o un forro polar, que el periódico local "La Voz de Pitufilandia", vendió, a precio de costo, previa colección de sus correspondientes cupones, en una cartilla que recogió dos meses antes, con el citado diario. He de decir, que el chaquetón en cuestión, es azul cantoso, con ribetes amarillos fosforitos, y tiene el escudo del equipo de sus amores. Club que no le gana a nadie, ni siquiera en el Monopoly a Ruiz Mateos. El Pitufo Caleti tiene también una perilla sin bigote, gafas de pastas, negras y gruesas, y un pendiente en la oreja izquierda, al más puro estilo de Tony Rodríguez.  También aprovecha sus fines de semanas para pasar tres kilos de la Pitufina, porque prefiere coger su barquita e irse a pescar, para luego ir al estadio "Alcalde Papá Pitufo", para ver a su equipo. Piensa de ella, que es una calientapollas porque tontea con muchos y luego no se va con nadie. El Pitufo Caleti, es natural de Pitufilandia capital, y más en concreto del Casco Antiguo, de un barrio de tradición carnavalera, donde ya ha salido en una chirigota, y ahora en una comparsa, haciendo él, una de las famosas voces de pito, que nadie soporta, pero que todo el mundo considera que son un arte. Por cierto, se le pone los pelos como escarpias cuando escucha el sonido de una bandurria. Y se le escapa alguna lágrima cuando un autor dedica una letra contra el maltrato de la mujer, para que todo el teatro “Pitufo Músico” aplauda sin fin.  

   El Pitufo Caleti se lleva mal, con los de otra aldea, esa que tiene un Ikea enorme. Pero aún así, va a ver las motos a dicha población. Y siempre exclama: ¡Puta X...! Además llama beduinos a los del Casco Nuevo. El Pitufo Caleti, no puede pasar un día, sin ver anochecer, en una playa, protegida por dos castillos, y un antiguo balneario, que no se sabe bien para qué sirve actualmente. Se toma una caña en sus chiringuitos, y observa las barcas mecerse con las olas, acompañado de la canción "Dancing Queen" de Abba como fondo, mientras las gaviotas rapiñan los trozos de panes y picos que se le caen a todo Dios, por no hablar de las cáscaras de melones que todos tiran a la arena, manjar por el que se pelean dichas aves. Hay que decir, que el Pitufo Caleti, mea en cualquier esquina, y bebe en la calle, porque siendo yo feliz, que les den por el culo a los demás, esa es su filosofía. Se caracteriza también por dárselas de "grasioso". Fama que se ha ganado por decir tres chascarrillos del tipo: pisha, bastinaso, y cosas así por el estilo. Se defiende cuando dicen que su gracia es chabacana, ordinaria y basta; olvidándose de que su aldea fue siempre refinada, y que su humor consistía en decir todo, sin decir nada, pero piensa que para elegantes y estirados están… los de la aldea del Ikea. Cuando cuenta un chiste siempre lo termina cantando piripiririiiii...clan, clan, como si estuviera en un cuarteto. Y siempre grita: "Esto es Pitufilandia, y aquí hay que mamar". Por cierto, tampoco soporta a los niños del programa del canal autonómico "Pitufo y Medio", porque van de enteradillos. El Pitufo Caleti siempre se queja de la "frialdad" de Pitufilandia que es una mezcla de frío y humedad; de hecho siempre dice que en Madrid si te pones un abrigo y una bufanda no pasas frío, mientras que en su aldea, la humedad se te mete en los huesos.

   El Pitufo Caleti, es el único que no hace nada, porque siempre está en paro, y sólo trabaja, de vez en cuando, en el momento en que le sale un currito. Y siempre está de oposiciones. Hay que decir, que sólo declara éste trabajo, porque en sus horas libres, se dedica a hacer chapuzas para ganarse un dinerito extra, algo que aprendió de su primo de la sierra, que cobra el PER, mientras fabrica carteras de cuero en un taller. En todas las empresas que trabaja el Pitufo Caleti, sólo cotiza cuatro horas, a pesar de que curra ocho, y cobra una mierda, porque así el Pitufo Emprendedor, dueño de una subcontrata, pierde menos capital, y le dice eso de: "si no te gusta, tengo doscientos más deseando trabajar"; ocurre eso, gracias a que la administración de Papá Pitufo y el representante del sindicato "Unión General de Pitufos Trabajadores", hacen la vista gorda. El Pitufo Caleti siempre se queja de que no tiene dinero, que no le llega para nada, pero tiene un "peaso coche", siempre está en los bares, y en verano, se va de viaje al extranjero, colgando desde su portátil (actualmente una tablet), las fotos que se hace con sus amigos del alma. Amigos por los que mataría a cualquiera, pero de los que raja a sus espaldas. Muchos de ellos tienen apodos como: Pitufo Cabesa, Pitufo Chino, Pitufo Negro, el Pitufo Nono...y casi todos trabajan en la Guardia Civil. Y tiene más préstamos y deudas que nadie, pero le da igual, porque él, va a seguir su ritmo de vida.

   El Pitufo Caleti, se ha hecho un tatuaje en el brazo, con la forma de una Virgen de la que es muy devoto, una de la que se dice, que en tiempos anteriores, fue capaz de parar un maremoto en las puertas de su parroquia. Y por ella, siempre se pega golpecitos en el pecho. También disfruta, nuestro Pitufo Caleti de su Semana Santa, de la que es muy forofo; cuando llega la primavera, en periodo de Cuaresma, todos los domingos está el primero en todos los besapiés, con su cámara réflex y su trípode, haciendo doscientas fotos. Esos días se viste de otro modo, llevando unos anchos pantalones colorados que le llegan a la altura del sobaco, una camisa rosa cantosa, con cuellos blancos impolutos, un medallón de su cofradía, tres kilos de gomina, y para esas ocasiones, se deja unas enormes patillas, bastante peludas. El Pitufo Caleti, siempre defiende el uso del paso de horquilla, y carga en varias procesiones cada año, porque también es admirador de los cargadores, y no de los costaleros que nos quieren meter los S...itas. El Pitufo Caleti, como todos los pitufos, tampoco va al festival de cine independiente de su aldea, como tampoco va nadie en Cádiz a ALCANCES. Tampoco va al cine convencional, ya que para eso está Megaupload, porque para que va a pagar por unas películas de nacionalidad pitufa, que son una porquería, con unos argumentos que nadie entiende, que son un panfleto político, y que al fin y al cabo, para ver un bodrio en una pantalla grande, no paga diez euros, que prefiere gastarse en unos churritos con chocolate, en un bar cercano al mercado de abastos de Pitufilandia. El Pitufo Caleti, también se dedica a hacer los belenes de su cofradía, y a vender polvorones para sacar algún dinerito para la misma, por Navidad. El Pitufo Caleti tiene problemas para hacer obras en su casa, con forma de seta, porque en sus jardines han encontrado unas necrópolis de unos pitufos fenicios que vinieron a su tierra, hará unos tres mil años, para fundar una aldea, en el quinto coño de donde ellos venían. Y tiene un perro mestizo, con muy mal genio, mezcla de pequinés con yorkshire, que lleva un abriguito, siempre va en brazos, y que, como decía la chirigota del Selu, hace sus necesidades en la puerta del supermercado. Por supuesto, nuestro amigo, no se agacha para recoger el excremento; pues las bolsas las guarda para la basura, esa, que suele dejar fuera de los contenedores, en vez de tirarla dentro. Por su culpa, está toda la aldea llena de heces de perro, que son pisadas constantemente por los turistas, y que dejan un olor nauseabundo que luego todos los foráneos asocian con Pitufilandia. El Pitufo Caleti es parroquiano de un bar de su barrio llamado "Seta Manteca", y es amante del lomo en manteca y del pescaito frito que tanto sobrepeso le suponen.

   El Pitufo Caleti opina, que como Pitufilandia no hay nada, y que ya puede estar muerto de hambre, que no se va a buscar trabajo a otro sitio donde haga más frío. Tiene una cuenta en Pitufibook, porque así se relaciona con los pitufos de su tierra. Es también aficionado a ver un programa de la televisión local, presentado por cuatro majolos, que se llama el "Submarino Azul. Y está enfadado con Gárgamel, porque a pesar, de ser diputado al Congreso por su aldea, no ha hecho nada por ella. El Pitufo Caleti, se declara de izquierda, pero vota a la derecha. Y siempre suelta: "Eso lo que hay", cuando algo no convence a un pitufo. En verano, disfruta guarreando la playa en una sucia barbacoa, en la que todos los pitufos van beodos, tras ver en su estadio el "Trofeo Papá Pitufo", donde esta vez, ha ganado el Betis, para variar. Al Pitufo Caleti le importa un huevo la celebración del Bicentenario de la I Constitución de Pitufilandia, porque sencillamente, lo único que va a traer es a un montón de políticos figurando y chupando cámara. Está harto de Papá Pitufo, porque se dedica a enchufar a sus amigos en las doscientas cuarenta empresas públicas que él ha creado, y que ningún pitufo sabe para qué sirven, y aprovecha EREs fraudulentos para dárselos a sus colegas, con la fecha de su nacimiento, como años cotizados. Y el Pitufo Caleti tiene una cosa en común con todos nosotros, está hasta los huevos de los políticos, porque prometen muchas cosas para su aldea, pero nunca llega nada, el paro sube, y si se logra algo, es tarde. Un saludo desde el sur.

Joé, me he quedado sin entradas para el Trofeo.

sábado, 10 de diciembre de 2011

El bosque mediterráneo en España

  Los españoles siempre hemos sido admiradores de lo ajeno, pero apenas nos hemos parado a mirar los tesoros que nos son propios. Hemos admirado a la selva ecuatorial, a las sabanas africanas, a los desiertos norteamericanos, los casquetes polares de la Antártida, e incluso, en nuestro país, hemos admirado más los frondosos bosques de hayas y robles intercalados de praderas de la Cornisa Cantábrica, y no sin razón. Pero nuestro país tiene la mayor extensión de bosque mediterráneo del mundo, un tipo de foresta que para nosotros es muy común, pero que es de lo más escaso en el mundo; tan sólo los países ribereños del Mare Nostrum gozan de su presencia, y no en toda su extensión (salvo Grecia, un país más pequeño que España). Por ejemplo, en Italia, el bosque mediterráneo existe sólo en sus márgenes costeros, al igual que la zona sur de Francia o el norte del Magreb. En cambio, en nuestro país, las extensiones potenciales (ya explicaré lo que es, más adelante) llegan desde el sur hasta los límites de la cordillera Cantábrica, y desde los límites de Portugal a la propia orilla del Mediterráneo. E incluso, hay pequeñas incursiones en la España atlántica, como los bien conservados encinares cantábricos o gallegos; a cambio, el clima atlántico injerta manchas de su bosque en ámplias zonas del occidente español, sobre todo en la media y alta montaña. También existe la foresta mediterránea en pequeñas zonas del sur de California y Sudáfrica, una pequeña porción de Chile y dos esquinas del sur de Australia.

   Hay que aclarar varias cosas antes de que comience a valorar la importancia del ecosistema mediterráneo. Por ejemplo, lo de la vegetación potencial, y lo explicaré con un ejemplo: había un dicho romano que decía que "una ardilla podía cruzar de punta a punta Hispania, desde los Pirineos al Estrecho de Gibraltar, sin pisar el suelo", basicamente ésto quiere decir, que muchos de los lugares que hoy día vemos desarbolados, eran realmente, extensiones de monte mediterráneo. Sin embargo, los romanos, como cualquier civilización tenía sus tópicos, y no todo en España era bosque, pues el clima mediterráneo incluye también zonas con extensiones esteparias naturales, que eran relictas de otra época, como ocurre con los Monegros o la zona de Tabernas. Pero cierto es, que donde hoy día existen páramos cultivados, hubo un espeso bosque Mediterráneo.

  El bosque mediterráneo es una incógnita en su origen, se sabe que nació en las solanas secas de los antiguos bosques tropicales que poblaban Europa en la época de los dinosaurios, allá por el periodo terciario, cuando nuestro continente se encontraba más cercano al ecuador de lo que está hoy día. Lo que no se sabe a ciencia cierta, es si sus árboles fueron una adaptación provenientes de climas templados, es decir, como en el caso del alcornoque o la encina, robles atlánticos que se adaptaron a la sequedad veraniega; o por el contrario son una adaptación xerófila de especies procedentes de bosques más cálidos y húmedos, como lo eran los tropicales, de ello puede dar testimonio especies como el laurel, procedente de la laurisilva; el olivo, cuyos parientes más cercanos forman sabanas en la zona sur del Sáhara; o el pino piñonero, de formación abierta, cuyo origen pudiera ser también, de sabana, pues de hecho, está considerado como el pino menos adaptado del Mediterráneo.

  Aunque hemos asociado el estío al buen tiempo y al sol, lo cierto es, que en el resto del mundo no es así, lo normal es que siempre llueva en verano, salvo en el clima mediterráneo. Que se caracteriza por tener un estiaje duro, sin lluvias y con una alta evaporación. Debido sobre todo a los anticiclones subtropicales, en nuestro caso, el de las Azores, que se suelen situar a la altura correspondiente a las latitudes mediterráneas. Por ello, nuestro clima se caracteriza por tener un invierno relativamente húmedo y suave, aunque con lluvias irregulares, y un verano seco y bastante caluroso. Conjugando los extremos de las dos zonas a las que sirve de transición: la templada, de la que recibe borrascas y olas de frío en invierno; y la tropical, de la que recibe la sequedad y las olas de calor, procedentes de las zonas desérticas.

  Es común decir que las zonas más cálidas de Andalucía son de carácter subtropical, y si bien no es mentira, lo cierto es que los operadores turísticos juegan con una media verdad, pues todo el área que cubre el clima mediterráneo es subtropical. De hecho éste tipo de clima se divide en dos, y se sitúan como una transición entre las zonas cálidas tropicales y las templadas: Mediterráneo, en las zonas occidentales de los continentes, y templado húmedo en las orientales. Considerando Eurasia como un auténtico continente, tendremos que en China el clima es templado húmedo, con un mayor índice de precipitaciones en verano, y un invierno, que no llega a ser seco, pero más escaso de lluvias; y en Europa meridional existe el mediterráneo, cuyas características ya expliqué en el párrafo anterior. En EEUU, es igual, mientras Florida o Alabama tienen climas templados húmedos, con precipitaciones estivales, California goza de un clima similar al nuestro. Aún así, quedan en nuestra península, restos de bosques templados húmedos, donde las lluvias son más abundantes, esto es, en la fachada atlántica de la península, destacando la laurisilva gaditana de Los Alcornocales, las loreras extremeñas o los restos de bosque húmedo de Monchique en el sur de Portugal.

  Si Brasil es la mayor reseva del mundo en cuanto selva ecuatorial se refiere, España lo es de un tipo de bosque que apenas existe si salimos de nuestro país. De hecho, casi todo lo que nos rodea son especies mediterráneas, incluso las exóticas, como el eucalipto rojo o la palmera washingtonia, que provienen de otros países cuyos climas son similares. Hay que decir, que el bosque mediterráneo es el más rico en variedad de especies vegetales y animales de Europa, encontrándose, extensiones esteparias, robles de hojas perennes o marcescentes (las hojas se quedan secas y caen al rebrotar de nuevo), varias clases de pinos, una de palmera, algunas lauroides (laureles), y sobre todo, gran variedad de arbustos y matorrales, además de helechos y epífitos en las zonas más húmedas.

  La extensión de nuestros bosques podría ser mayor de lo que se piensa, todavía se discute, si Canarias, es el límite del mundo mediterráneo, pues también tienen acebuches, sabinas y demás especies parecidas. Los llamados bosques termófilos de las Islas Afortunadas tienen mayor parentesco con los peninsulares de lo que en un principio se creía. Pero a mi parecer, lo del caso canario, lo incluiría, en una confluencia de caminos entre varios climas: mediterráneo, templado húmedo, y desértico costero tropical.

  Llama la atención el tamaño pequeño de las especies animales y vegetales del mundo mediterráneo. Ésto es debido a la sequía estival, que no deja desarrollarse bien a las especies arbóreas y arbustivas, teniendo que adaptarse, tomando formas, tanto en sus hojas como en su fisonomía, de manera esclerófila y dura, para contener la pérdida de agua a causa de la fuerte evaporación. De hecho, muchas especies germinan tras los incendios, que suelen ser abundantes durante los estíos. (Me refiero a los que se producen de forma natural, bastantes menores en cantidad que los que se producen de forma artificial). Los animales por tanto, siguen su forma de vida con respecto a las de sus bosques, y por ello, la mayoría de las especies españolas tienen un tamaño reducido, y de color parduzco o marrón (más fácil de ocultar entre la hierba seca). Una curiosidad de entre nuestros animales, se encuentra en los conejos, especie cuyo orígen se sitúa en la Península Ibérica como especie salvaje, el resto de poblaciones de conejos del mundo proceden de la mano del hombre.

  El clima mediterráneo es de los únicos que permite una ámplia variedad de subclimas según la latitud y la altitud en la que nos encontremos; no es lo mismo el clima Mediterráneo de Cádiz que el de Málaga, siendo ambas provincias limítrofes, mientras la primera es más húmeda en cuando a humedad ambiental y a precipitaciones, la segunda es más seca y tiene temperaturas más cálidas, sobre todo en verano. Es por ello, que los bosques no son iguales entre un lado y otro; por ejemplo, tomando una misma especie dominante, el alcornoque, sus formaciones no son iguales en Cádiz que en Gerona, mientras en la primera abundan los helechos endémicos, numerosas lianas y epífitos, tomando unas características propias de bosques tropicales, en la segunda encontramos formaciones más parecidas a los bosques atlánticos y centroeuropeos, con helechos reales, y una mayor variedad micológica. También destacar la curiosidad, de que el clima mediterráneo permite formaciones naturales de estepas o praderas, algo que sólo existe en zonas continentales y predesérticas de los continentes.

  Y por último resaltar, que las montañas de la zona mediterránea son los únicos que conservan todos los ecosistemas europeos en cuanto se asciende por sus laderas. Ésto es debido, a que la altitud y la latitud son equivalentes en cuanto se gana en altura o en grados, por ello, es posible encontrar todos los tipos de bosques europeos en nuestro suelo patrio, las mejores manifestaciones se encuentran en los Pirineos y Sierra Nevada, aunque en ésta última la vegetación está muy degradada. Para explicarlo de modo más sencillo pondré un ejemplo, entre paréntesis el ecosistema que representa en latitud:

    - Bosque mediterráneo, (30º a 45º de latitud) siempre en la base, termina en distintas alturas según la latitud, en Andalucía puede llegar hasta los mil metros.

    - Bosque atlántico, (45º a 60º de latitud), a partir de los 800- 1.000 metros en las zonas mediterráneas, según su latitud. Especies: robles melojos, hayas, castaños y rebollos.

   - Bosques de coníferas o taiga (60º al Círculo Polar Ártico), entre los 1.200 a 2.000 metros en las montañas mediterráneas, según latitud. Especies: abeto blanco (Pirineos y Cataluña), pino silvestre y salgareño (en la mayoría de lugares) y abetos pinsapos (serranías rondeñas y de Cádiz)

    - Praderas de alta montaña, pedregales y nieves perpetuas (66º hasta el Polo Norte), parecido a la tundra norteña y las zonas polares en las altas montañas mediterráneas. Sierra Nevada, Pirineos, Sistema Central y Moncayo.

  Para mi gusto, el artículo se queda demasiado largo, algo que en mí, por otro lado, es normal, es lógico, a priori, que con tanto tostón, no se acerque ni un alma a leer mis entradas (y menos mientras juegan ahora Madrid y Barça), pero lo cierto, es que con que lo lean y valoren la importancia de nuestros bosques sólo unos cuantos lectores, me basta. No pretendo gran cosa, sino concienciar que lo mismo que culpamos a Brasil de los desastres ambientales de su país, debemos mirarnos a nosotros mismos y tener en cuenta que la mayor reserva mediterránea del mundo está en España, y a diferencia del país sudamericano, los bosques mediterráneos no existen, prácticamente, más allá del Mare Nostrum. Pues es un clima y un tipo de bosque único. Simplemente, y para acabar, y hacernos una idea de lo que representa nuestros bosques a nuestra cultura, os pediré que soliciten una tapa (si es que existe eso en otro lado) de aceitunas, o cualquier cosa hecha con aceite de oliva, o un buen vino, en otro país, a ver que cara os ponen, y que es lo que os contestan, y si en el mejor de los casos, os lo sirven, preparad la cartera, porque seguramente, en esa nación, todo lo que he dicho sea de importación, mientras que aquí abundan por doquier. Un saludo desde el sur.

Típica formación de alcornoques de las montañas, con espesuras considerables

En la imágen se observa la gradación del bosque, con distintos tonos de verdes,  variando las especies según la altura y orientación de la montaña.

Ejemplares de alcornoques en la solana. Formación más abierta y arbustiva.

Los bosques mediterráneos en alturas superiores a los 1.000 metros tienen parecidos con las taigas norteñas.

Alcornocal de llanura en las tierras de Cádiz, donde se alternan con las praderas

Típica formación de pinos piñoneros, que se suelen adaptar a terrenos arenosos cercanos a la costa.







domingo, 4 de diciembre de 2011

El Puerto de las Palomas

  Ya empezó al fin el frío, y era hora, pues estamos a diciembre, y todavía no he utilizado un jersey, tenía ya complejo de jamaicano con tanto calor. De hecho, es la primera vez que he visto, que todo el mundo ha pillado el rasca (no el de Navidad) con ganas, cuando lo contrario es lo que se coja de buen agrado es el calor. Y es que éste año los osos polares todavía tienen que estar celebrando el entierro de la caballa. Ahora bien, hará unos años, por estas fechas, en el año 2.009, visité el Puerto de las Palomas, en la Sierra de Grazalema con la intención de ver la nieve, algo que es un lujo en Cádiz. Pues a pesar de la altura del macizo, que alcanza los 1.654 metros con el pico del Torreón, la nieve sólo aparece en días contados, y tiende, la mayoría de las veces a derretirse con los primeros rayos de sol. Ésto es debido al clima de la zona, relativamente cálido (de hecho el palmito se cuela en alturas superiores a los mil metros) y al altísimo índice de precipitaciones de la serranía, que son las más altas del país con una media de 2.200 litros por año, aunque a veces se llegan a alcanzar los 4.000 litros (año 1.989); todos sabemos que las lluvias derriten la nieve, por ello lo escaso de ella en éstas montañas. Sin embargo, aquel invierno, a diferencia del actual, era de verdad, fue largo y crudo en toda la península, y por aquella época, que frecuentaba viajes hacia Almería me hizo ver cosas tan curiosas como las cumbres nevadas de las montañas más altas que bordeaban al Desierto de Tabernas. Por ello, aprovechando que ha entrado el frío, propongo hacer un viaje imaginario al puerto de montaña más alto de Andalucía occidental.

  Tal vez el dato que expongo en el párrafo anterior sorprenda a más de alguno, y es que el puerto en cuestión, se sitúa a una altura de 1.189 metros, con una de las peores carreteras que he visto en mi vida (sólo superada por algunas de las de Sanabria, en Zamora). Tampoco es que sea muy relevante, pues la parte más occidental de Andalucía es una tierra esencialmente llana, y en la Sierra Morena de Sevilla y Huelva, las alturas de sus picos más altos no llegan a los mil metros; por lo que por muy bajo que fuera el puerto aún seguiría siendo alto comparado con lo que le rodea. Pero lo cierto es que el temido Puerto de la Mora, en Granada, sólo lo supera en 200 metros, con unos 1.389 de altura, y eso en la provincia con más montañas del España. Así pues, tampoco podemos minusvalorar al de las Palomas. Lo cierto es que al principio de llegar, aquel día nos llevamos una decepción, pues al acceder desde Benamahoma, todavía a alturas relativamente bajas, donde los alcornoques, encinas, pinos carrascos y laureles forman aún bosques densos, que con las frecuentes nieblas y lluvias recuerdan a los montes bolivianos, no había aún nieve. Y a pesar de que una vez pasada dicha población, tuvimos una subida importante, y la vegetación empezó a cambiar por otra más montañosa, lo cierto es que, la nieve seguía sin aparecer, sólo algún manchón, y sobre todo, de lejos, en los picos más altos. Pero como por arte de magia, en un cruce de caminos, que lleva al puerto en si, y tras pasar dos enormes farallones, la nieve empezó a hacer acto de presencia como si hubiéramos pasado de un país a otro sin comerlo ni beberlo. De todos modos, el paisaje era espectacular, y la carretera permitía ver todos los estratos de vegetación de la sierra:
     - Espeso bosque mediterráneo húmedo, con encinas, alcornoques, quejigos, laureles, etc. Más pinos carrascos procedentes de una repoblación.
      - En un segundo estrato se sitúa un bosque más montano, donde lo original sería un mayor protagonismo del quejigo, que a pesar de su abundancia, perdía protagonismo con la variada diversidad de coníferas, la mayoría de repoblación: pinos marítimos, piñoneros, cipreses de distintas clases, y lo que más me llamó la atención, cedros del atlas, muy comunes en las repoblaciones que se hicieron en las montañas béticas andaluzas, desde Cádiz a Almería. Éste bosque se mostró espectacular, pues la espesa niebla y la llovizna nos trasladaban a paisajes más norteños.
      - En un tercer estrato se situaría en sí, a alturas, ligeramente superiores al anterior, o a la misma, pero orientadas hacia el norte. Aquí, se siguen encontrando los mismos bosques de coníferas, pero además se le añade la joya del parque, algunos pies y bosquetes del abeto más amante del calor de Europa: el pinsapo. Que al parecer, y gracias a los cuidados de los gestores y trabajadores del parque, ha pasado de estar en peligro crítico, a lograr, un lento, pero efectivo aumento de su población, y vuelve a reconquistar lugares que le fueron arrebatados. Aquí la nieve fue donde se mostró en su esplendor, y es que a estas alturas, es donde, relativamente, es fácil ver nieve por éstas latitudes sin tener que irte a Sierra Nevada o la vecina de Las Nieves. Aquel día parecía que estábamos en otro paraje más nórdico, pero era sólo un espejismo, detrás de aquellos abetos, unos cuantos acebuches (olivos silvestres) nos delataban que nos encontrábamos ante una de las sierras más sureñas de Europa. En éstos parajes, es fácil de ver a otra especie, que llegó a extinguirse en éstas tierras: la cabra montés. Desaparecida a causa de la sarna, volvió repoblar éstas sierras procedentes de las montañas malagueñas, cuando su población volvió a aumentar, y todo fue en un acto de la naturaleza.

   Para terminar, recordaré lo dicho en el primer párrafo, ésta es la zona donde más llueve de España, pero a diferencia de como ocurre, por ejemplo en Galicia, lo hace sólo en invierno, de forma muy torrencial, llegando a veces a reventar caños, es decir, hacer salir el agua por los desagües de las casas. Precisamente, éste punto, el Puerto de las Palomas, es donde se registran las mayores precipitaciones, por ello la profusión de helechos y las constantes nieblas, que son nubes que pretenden atravesar la sierra, descargando de forma continuada en la zona. Aquella excursión la guardo en mi mente con muy buen recuerdo, gracias a la belleza del paisaje y de la buena compañía que tuve aquel día. Pero sobre todo, me quedo con el silencio que el bosque transmitía, un silencio nada normal para alguien que es urbano, y que todavía se conserva en un espacio natural que llegó a ser tramitado para ser parque nacional por la II República, pero que quedó en aguas de borrajas, cuando estalló la Guerra Civil. Méritos no le faltan: nada menos 136 especies de aves, 40 de mamíferos, 14 de reptiles y diez de anfibios. Además de tener la mayor concentración de buitres leonados de Europa, unas 1.000 parejas y las mayores concentraciones de murciélagos hibernantes, unos 10.000; así como una flora única, diversa, de aspecto prehistórico en ocasiones y que, a veces,  llega a tener espesuras propias de selva. Se hace de noche y volvemos, el silencio sigue en la sierra, mientras volvemos al ruido eterno de la ciudad, toda una lástima, porque, de no ser por las obligaciones, yo me hubiera quedado. Un saludo desde el sur.
Niebla y nieve en la sierra.

El Puerto de las Palomas con nieve.

Las repoblaciones pinariegas son comunes en el trayecto.

Bosque de pinos marítimos.

Los pinos se aferran a un pequeño trozo de tierra en los acantilados.

Ejemplares jóvenes de abetos pinsapos en el puerto.

Parte inferior del puerto.

Ejemplar joven de pinsapo, al fondo, un acebuche nos chiva donde estamos realmente.

Un enorme ejemplar de ciprés.

Pinos piñoneros y marítimos se mezclan en un llano.

Ejemplares de cedros del Atlas entre los pinos.

Pinos, cedros y cipreses entre la niebla.

El bosque entre la niebla.

Las copas de los cedros destacan entre las de los pinos.

Parte algo inferior a la anterior, ocupada por bosques mediterráneos, con frecuencia de quejigos.

La noche en el bosque mediterráneo.

Espeso bosque mediterráneo de alcornoques y encinas.

Otra vista del bosque mediterráneo.

domingo, 27 de noviembre de 2011

Las palmeras en España


  El viernes fue tranquilo, me quedé viendo hasta tarde una película que ponían en la tele: Corrupción en Miami. Y se me encendió el chip, pues no sabía de qué escribir ésta semana, así que como todos tenemos asociados a Miami, California y Hawái con el sol y el buen clima, asociamos inherentemente a una flora particular a dichos lugares: las palmeras. Hay que decir que no hay que ir tan lejos para observar palmeras de distintos tipos, ya que vivimos en un país privilegiado, también, en cuanto a sol y temperatura, y nuestra zona, precisamente está entre las mejores. De hecho España es uno de los países que exporta palmeras a distintos países, mayoritariamente, suelen proceder de viveros, y aquí cerca, hay uno, en la población del Portal, pedanía de Jerez, cercana al Puerto de Santa María. Como curiosidad, sobre todo para aquellos que son aficionados al cine, les contaré, que por ejemplo, la película de La Chaqueta Metálica de Stanley Kubrick, está rodada en un polígono industrial, que por aquel entonces estaba abandonado en Londres, y para añadir el toque tropical necesario a la película, importaron palmeras españolas que sirvieron para dar el pego. 

  Aunque solemos llamarlas como palmeras en sí, lo cierto es que su verdadero nombre es el de palmas, y la primera acepción es sólo correcta cuando se habla de la datilera o la canaria. También tendemos a simplificar, y aunque creemos que hay sólo unos cuantos tipos de ellas en nuestro país, lo cierto es que hay, al menos, 15 especies que son comunes en nuestra geografía, y otras tantas, que actualmente, están en periodo de prueba en distintos jardines, para ver si se adaptan a nuestra tierra. E incluso para más inri, hay una que es autóctona en nuestra geografía, aunque es muy poco conocida (salvo para los comilones), y eso sí, es la más pequeña de todas, pues apenas logra alcanzar el metro de altura en su estado adulto: el palmito. Salvo ésta última el resto son importadas, aunque hay algunas como las datileras, las canarias o las californianas, que se han adaptado tan bien, que han acabado por naturalizarse en nuestros paisajes, de hecho, las últimas, provenientes de California, con un clima similar al nuestro, crece de manera fácil y espontánea, y algunas asociaciones ecologistas la quieren añadir como especie invasora. En cambio, las dos primeras se encuentran ya,  muy unidas al folclore nacional, y por ejemplo, se emplean sus hojas para adornar los balcones y fachadas en Domingo de Ramos. Sin embargo, no son propias de la península, ni siquiera de África, a pesar de que ya, pensamos que tanto en nuestra tierra, como en el Magreb hay palmeras que llevan hay toda la vida, cuando fue una importación de los árabes, en cuya península sí eran naturales, así pues, tanto los palmerales libios en los oasis, como los existentes en las cortijadas españolas, son actualmente propios del lugar, pero sus antepasados procedían de Arabia. En concreto, en España se introdujo, también, con la invasión árabe, gracias a Abderramán I, que las importó para la producción de dátiles. Y hoy día, nos parecería mentira nuestro país, sin palmeras, por ejemplo, en época de los godos. Lejos de querer enrollarme más, expongo las especies más comunes, con una foto, a ser posible, para que se logren distinguir de modo más claro a las palmas andaluzas y gaditanas en concreto:

 - El Palmito: de pequeño tamaño, apenas, si puede lograr el metro, es el único autóctono de España, y de todas las líneas costeras del Mediterráneo. Tiene la característica de que suele crecer en grupos y, concretamente, en lugares secos y soleados, aunque los he logrado ver, en nuestra tierra, en zonas inundables, como en la Carretera de las Lagunas (Chiclana) y en la Mesa Baja (Alcalá de los Gazules).

 - La Palmera Datilera: la palmera por excelencia, de hecho, lo correcto es que al resto se le denominen palmas. Importada en España por la cultura árabe, durante la edad media, actualmente está naturalizada en el sur de la península. De hecho, uno de los palmerales más grandes del mundo se encuentra en la ciudad de Elche. Tan común en nuestro paisaje que ya forma parte del mismo, a pesar de que es foránea. Actualmente, se encuentra su población, en descenso crítico, a causa de la plaga de picudo rojo, un escarabajo rojo, del desierto, de difícil erradicación.

 - La palmera Canaria: muy parecida a la anterior, pero con el tronco más gordo, y con hojas más oscuras, además tiene una “copa” más lustrosa. De crecimiento muy lento. Es natural en nuestro país en las islas Canarias, donde suelen formar bosques termófilos a media montaña con los también conocidos dragos y acebuches. Está muy extendida también por Andalucía, incluso ya, de forma natural, en algunos rincones, y soporta bastante bien el frío. También está afectada por el picudo rojo.

 - Las palmeras californianas o tipo washingtonias: son muy común en Andalucía, donde gracias a sus frutos, crecen de manera espontánea, pues provienen de un clima parecido, el del sur de California, y norte de Méjico. Crecen en nuestra tierra con muy pocos recursos, apenas un poco de suelo y algo de lluvia, incluso creciendo entre adoquines de las aceras. Son altas y espigadas, y para ayudar a asociarla, hay una imagen que enseguida vendrá a nuestra cabeza, la de Eddie Murphy en Superdetective en Hollywood, donde se le ve con estas palmeras de fondo. No les afecta el picudo rojo.

 - La palma Coco plumífero: muy común en nuestras ciudades desde los años 90 a esta parte, con ella se adornan paseos, rotondas, e incluso playas. Le añaden un aspecto muy tropical al lugar en el que se han plantado. Son las típicas, que actualmente se asocian a Bahía Sur, y provienen del Norte de Argentina y sur de Brasil (la región del Iguazú), necesita pocos cuidados en nuestra tierra, salvo un poco de humedad en verano.

 - Palmera Kentia: muy común en los patios interiores de Cádiz. De origen australiano, es también muy común en los jardines de nuestra tierra, sobre todo en Cádiz y Málaga, donde pueden a llegar a alcanzar alturas considerables. Tiene también un aspecto tropical, y de hecho, es de las más cultivadas en Canarias. De pocos cuidados en nuestra tierra.

 - Cocoteras: las he incluido más como una curiosidad, pues aquí sólo pueden crecer en interiores, y con muchos cuidados, pues es la palmera tropical por excelencia: no soporta temperaturas más bajas de 18º, ni escasez de humedad. De hecho, en los años 80, se fueron a pique el 75% de las cocoteras de Florida en una helada. Aquí, en nuestro país, sólo crecen, y plantadas, en las zonas costeras canarias, aunque hay quien asegura, haber visto algunas en los distintos tramos de costa entre Motril y Cádiz, aunque es muy poco de fiar este dato.

  Y una última curiosidad: no son árboles, en sentido estricto, sino monocotiledoneas, estando más emparentadas con las hierbas que por ejemplo, con un chopo. Aunque seguramente, me haya dejado, muchas en el tintero, lo cierto, es que prefiero no alargar más éste artículo, pues sino corre el riesgo de parecer una clase magistral, simplemente, con que se conozcan nuestras palmas más comunes y abundantes en nuestra tierra me llega. Pues forman parte inherente a nuestro paisaje y nuestra alma colectiva, y créanme, que cuando tengo que viajar a otros lugares más fríos, una de las cosas que más echo de menos son la silueta de alguna palmera, o una doble hilera de las mismas, en alguna calle, como es común aquí. Puedo parecer friki, pero no puedo evitarlo. Un saludo desde el sur.

Palmeras Canaria (Izquierda) y Washingtonia (derecha) en la playa de La Casería, San Fernando.

Ejemplar de Coco Plumífero en Bahía Sur, San Fernando.

Grupo de Washingtonias, datileras y canarias en el Parque Genovés, Cádiz.

Las palmeras datileras adornan muchas plazas, como ésta de San José en San Fernando.

Palmera datilera en la plaza de la Catedral, en Cádiz.

Alineación de palmeras canarias en un convento abandonado en San Fernando.

Grupo de Cocos Plumíferos en el parque de la Oliva, San Fernando.

Coco plumífero al anochecer, una imágen casi tropical de Bahía Sur, San Fernando.

Grupo de palmitos entre pinos piñoneros, carretera de Las Lagunas, Chiclana de la Frontera.

Ejemplar de palmito, Cañada de los Marchantes, Medina Sidonia.

Grupo de palmitos, Cañada de Marchantes, Chiclana de la Frontera.

Coco plumífero y datilera adornadas por Navidad, San Fernando.

Grupo de Washingtonias en Cádiz.

Los ejemplares grandes son Kentias, típicas en los patios y jardines de la provincia. Hospital de Mujeres, Cádiz.

domingo, 20 de noviembre de 2011

Curiosidades democráticas


   Aprovechando que estamos en jornada de reflexión (aunque cuando leáis esto, ya es hora de votar) y que también, vivimos en una tierra de larga tradición democrática, pues no obstante, la Constitución de 1.812 de Cádiz, fue de las primeras del mundo, aunque su duración, fue efímera. Voy a escribir algunas curiosidades relacionadas con las democracias españolas, aunque sin profundizar demasiado en el tema, pues no soy un especialista, simplemente enumeraré algunas anécdotas que sólo pueden pasar en éste país. Hay que decir, que consideraré como democrático, incluso, el periodo decimonónico del turnismo, pues aunque fueran una pantomima de elecciones, ayudan a alargar algo el artículo, pues si no, nos tendríamos que ceñir solamente a cuatro periodos, que por ahora, son cortos a nivel histórico: 

-         -  El bienio de las 1.810 a 1.812, que se ciñó solamente a las islas gaditanas, y parte de América.

-         -La I república, que duró menos de un año.

-         -La II república, que duró tres años.

-Y el periodo actual, que por ahora, es el más largo de los que hemos tenido con democracia, unos 36 años si incluimos la Transición, por lo que se demuestra con ello, que nuestra tradición democrática (a nivel nacional), es cuanto menos, escasa en tiempo.

No tendré en cuenta el orden cronológico, sino que escribiré, en función de lo que me acuerde, literalmente. Ahí van, al igual que diría Becquer, como la sota de bastos:

-           En éste año, que Loterías del Estado, anuncia un Gordo más generoso que los anteriores, voy a sorprender a más de algún lector que guste de jugarse todos los años algún dinerillo con la esperanza de que le toque. Situada frente a la iglesia de San Servando y San Germán, se encuentra la rotonda Loterías del Estado, llamada así en honor a la primera lotería fundada en España, que nació en nuestra ciudad, San Fernando, con las Cortes de Cádiz. Así pues, los primeros premios Gordos de Navidad cayeron en Cádiz, como no podía ser de otro modo, aunque desde entonces no ha vuelto a tocar ningún primer premio en nuestra tierra. La idea surgió para recaudar fondos para la lucha contra Napoleón.

-      En la Constitución de Cádiz las mujeres no podían votar, sólo los hombres, y no todos. A pesar de la idealización que actualmente tenemos de aquella primera Carta Magna, lo cierto es que, a pesar de que fue muy adelantada para su época, tenía ciertas deficiencias que actualmente vemos políticamente incorrectas, pero que eran de lo más normal para la época. Caemos, muchas veces en un error al pensar con mentalidad actual, pero en el prisma de aquella época, la abolición de la Inquisición, se vio como algo revolucionario, y era normal, que en otras democracias las mujeres y esclavos no votaran. Asimismo, fue la única en reconocer a sus colonias y habitantes, como españoles, al igual que los peninsulares.

-      Se cuenta, habitualmente, que la Constitución de Cádiz inspiró en gran medida a las Cartas Magnas de Hispanoamérica, pero pocas veces se cuenta que las bases democráticas de los países escandinavos, y otros europeos, como Finlandia, casi copiaron el texto de la famosa Pepa. Siendo una herencia gaditana, para bien, que se ha extendido a gran parte del mundo. Asimismo, se suele asociar a la Constitución de Cádiz con la influencia de los masones, pues fueron bastante participativos en ella, y la Tacita de Plata está llena de símbolos de diferentes logias en su casco antiguo. Había tantos, que se decía de nuestra ciudad, literalmente, que había más masones que putas. La influencia masónica vino en gran parte de Francia, pero como era nuestro enemigo en aquel momento, se dice que fue una constitución bastante influida por la norteamericana, de hecho en San Agustín, Florida, en EEUU, se encuentra el único monumento a las Cortes de Cádiz, junto con el de Méjico D.F. fuera de España. Curiosamente, se dio el caso de que los franceses que venían a dejarnos una influencia democrática (aunque fuera a ostias), se fueron con el rabo entre las piernas, por otros que luchaban por lo mismo.

-         Sobre el periodo decimonónico, y el turnismo, hay todo tipo de anécdotas, la más común, es algo, que si hoy nos quejamos de bipartidismo, aquello ya era descarado. Pues el periodo caciquil se llamaba turnista por lo mismo, los dos grandes partidos, se turnaban para amañar los votos de cada legislatura, y así poder gobernar todos, con ello se pretendía dar más estabilidad a una España bastante combativa.

-           La I república duró menos de un año, pero tuvo cuatro presidentes (en nuestro periodo mañana tendremos al quinto), dos de ellos gaditanos; el más famoso, sin duda fue Castelar. Aún se dice en Cádiz aquello de que “hablas más que Castelar”, pues era un orador que no tenía fin. Cuentan las malas lenguas, que en cierta ocasión, en una intervención en el Congreso de los Diputados tardó 24 horas en exponer sus tesis, pues diferencia de ahora, no había turnos con un tiempo estimado, así pues, cada uno podía enrollarse lo que quisiera.

-       Sobre el Sexenio Revolucionario llama la atención  la desconocida guerra de los Cantones, de los cuales, los más famosos fueron los de Cartagena, Sevilla y Cádiz. Que se declararon independientes, asimismo, entre las distintas ciudades, hubo guerras por ampliar su territorio, como por ejemplo pasó, entre San Fernando y Cádiz, que tuvieron una lucha armada por la posesión del molino de mareas del río Arillo. También en La Isla hubo otra guerra interna entre la propia ciudad de San Fernando y la población de San Carlos, fiel al estado, como es lógico en una zona militar. El político más famoso de aquella época fue el alcalde anarquista de Cádiz: Fermín Salvoechea. La cosa, como no podía ser de otro modo, terminó de mala manera, con el ejército realista ganando todas las ciudades para la causa realista. El cantón que más duró fue el de Cartagena, que tuvo que ser atacada por tierra y mar.

-         En la II república las mujeres aún seguían sin votar, ya en aquella época Clara Campoamor luchó por el voto femenino, y por tanto del sufragio universal, pero curiosamente, fue la izquierda la que negó el voto de ellas, pues argumentaban que las féminas tenían ideas más conservadoras que los hombres, por causa de su analfabetismo, con ello se pretendía evitar que gran parte del sufragio fuera para la derecha, que en aquella época sólo obtuvo poder con la CEDA.

-         En el mismo periodo, es curioso constatar, que jamás existió la mayoría absoluta, y que era común que varios partidos se unieran para formar gobierno. Pero no piensen que es como ocurre actualmente, en los que el PSOE o el PP son mayoritarios, y se apoyan en partidos regionalistas para alcanzar una necesaria estabilidad. En aquella época, era común la unión de más de tres partidos, e incluso cinco o seis, donde ninguno de ellos tenía una mayoría clara como ocurre actualmente. Se daba el caso, entonces, trasladándolo a la época actual, de que tendríamos por ejemplo: un presidente del PSOE, un Vicepresidente de IU, y varios ministerios fueran repartidos entre PSOE, IU, ERC, PNV y BNG. 

-             Curiosamente, siempre hago la asociación de que ningún nombre cumple con lo que promete. Y el ejemplo más claro es el del Partido Radical, que existió en la II República, y que fue el único partido de centro de la época, y ciertamente, el más moderado de todos, lejos, precisamente de toda radicalidad. Todo ello viene por su mandamás, que era Alejandro Lerroux, quien fundó el partido con un tono combativo en la lucha de clases, pero que pasó varios años de cárcel por ello, siendo ésta la causa de que su voz se fuera moderando cada vez más.

-       Todos sabemos cómo acabó la II República, y como la bandera tricolor fue denostada por el nuevo régimen, cuya bandera fue reconocida por todos los países, siendo ilegal la bandera republicana desde aquel momento. Por aquel entonces, se encontraba refugiado Azaña en la frontera francesa, país éste último, que fue conquistado por los alemanes. Así pues, el ex-presidente, aparte de ser perseguido en España, también lo era en Francia. Pero justo antes de ser buscado por la GESTAPO, falleció de manera irremediable; en su entierro, los exiliados quisieron homenajear al antiguo presidente poniendo la bandera tricolor en su ataúd, pero al ser ésta una bandera no reconocida no se permitió tal fin. Por ello, para salvar los muebles, el país de Méjico, quien más ayudó a la república, en un bonito gesto, honró honores a Azaña con su bandera nacional. Así pues, el presidente que más duró en la república está enterrado con la bandera del país americano, en Francia, a causa de éste triste suceso.
-               
                 Sobre la transición se ha dicho de todo, por aquella época abundaban los grupos terroristas, pero sin duda, el más activo, y el único que pudo desestabilizar la democracia fue ETA. Sobre éste periodo convulso ni los propios presidentes sabían muchas veces, el porqué de los sucesos acaecidos. De hecho Adolfo Suarez, llegó a decir literalmente: “A pesar de los años que llevo en la Moncloa, aún no se si ETA cobra en rublos o en dólares.”

-      Pocos saben que la Transición española fue tomada como ejemplo en los países del este de Europa, especialmente Polonia, y gracias a ello, muchos de estos países, anteriormente bajo el orbe soviético, actualmente son democracias, y bastantes de ellos, o bien pertenecen a UE o están como candidatas a entrar.

       Espero haber servido de distracción en éste día en el que se va a votar, pero recuerde bien, que la papeleta que tiene usted en su mano ha costado mucha sangre. Aunque he pretendido escribir una entrada más o menos simpática, lo cierto es, que debemos valorar lo que tenemos, pues la democracia española ha costado cerca de dos siglos en instalarse, y siempre lo ha hecho de la manera más convulsa. Actualmente vivimos en un periodo de placidez, y a pesar de la crisis,  nunca se ha estado tan estable como ahora, por ello es casi obligatorio votar en el día de hoy, y escoja lo que escoja, siempre será buena opción, pues por eso han hecho nuestros antepasados un sacrificio tan enorme: para que podamos pensar libremente. Algo que hoy día damos por hecho, pero que si uno se detiene a mirar de reojo la historia española, para nada ha sido lo común en nuestro país. Un saludo desde el sur.




Imágenes del monumento a las Cortes de Cádiz