Después del mal Mundial de España, es momento de meter el dedo en la llaga, y recordar que estamos en crisis. Pero a pesar de la dureza, y sobre todo, de lo alargado de la tortura que venimos sufriendo; hay que decir, que ésta, no es la primera, ni será la última crisis, con sus respectivas burbujas. Y de hecho, ni siquiera ha sido la peor, aunque casi. Todo sistema, no solo el capitalista, tiende a tener crisis cíclicas: las ha tenido el Imperio de los Césares de Roma, los reinos feudales, y los absolutistas, también las naciones comunistas, los grandes imperios centrales, o los imperios coloniales. La diferencia entre unas y otras, es la capacidad de recibir los envites de las distintas crisis sin verse demasiado mermadas. Se han visto, naciones y economías, que han prosperado de manera espectacular, pero que a la primera crisis caían como un sistema de naipes. Y otras que siempre han tendido de un hilo, y se han ido recuperando, o salvándose in extremis. No obstante, toda crisis conlleva a un movimiento, cual seismo, de fronteras, formas de vida y economías. Incluso de poderes militares. Sin más preámbulos, ahí enumero, de forma muy resumida, y en varias entradas, las crisis económicas más famosas, y las más globales, de la historia.
- La Invasión de los Pueblos del Mar. Año 1.200 a.c.
En todos los periodos históricos hay civilizaciones que irrumpen conquistando, de forma repentina, toda nación que les rodea, y que eran, en teoría, más antiguas, más sólidas y mejor armadas. Sin embargo, pocas civilizaciones tan extrañas como la de los Pueblos del Mar, de los que casi nada se sabe, ni siquiera, su procedencia. Pero salvo, las invasiones árabes, la de los hunos o la de los mongoles, pocas han cambiado tanto, la faz del mundo que les rodeaba. De hecho, casi todos los historiadores coinciden en que su irrupción fue un desastre, creando una época oscura. Grecia fue arrasada, salvo la Acrópolis ateniense, la cultura micénica desapareció. Asia Menor no quedó mejor, Ugarit o Tarso cayeron, y fue el fin del Imperio Hitita, que por aquel entonces, le hacia frente al reino de los faraones. Egipto, asimismo, perdió todo territorio de Asia Menor, que nunca volvió a recuperar. Tan solo las ciudades fenicias de Biblos y Sidón se salvaron de la quema, pues la propia Tiro sucumbió.
- La Crisis del Siglo III.
También llamado el periodo de Crisis Imperial, o de Anarquía Militar, es una de las primeras crisis globales que entran dentro de una decadencia económica. Y afectó, sobra decirlo, a un Imperio Romano, que venía disfrutando de su mayor esplendor con la Pax Romana existente en los dos siglos anteriores. Aunque fueron constante los golpes estado, y se sufrieron las primeras razzias bárbaras, solo se venía a certificar la caída de un régimen imperante durante varios siglos. Sin embargo, la falta de conquistas, cuyo freno se puso en el siglo anterior, con el emperador Adriano, supuso el principio del fin de una economía, puramente, colonial, y el fin de materias primas, y de mano de obra baratas. Básicas para la economía de Roma. La ciudadanía se fue acomodando, y fue viviendo, cada vez más de las rentas, y creció de forma importante un segmento de población cada vez menos productiva. Se dio en el siglo III una hiperinflación, a causa de las constantes devaluaciones de la moneda. Siendo eso un enorme problema en un periodo en el que aún, no existía el papel moneda, y todo dependía del valor del metal de la moneda. La corrupción de todos los estamentos, y los sobornos, harían el resto. Era el principio del fin del imperio, que sería arrasado en su zona occidental por los bárbaros en los dos siglos posteriores. Desapareciendo toda economía, y volviendo en muchas ocasiones, al trueque.
- Crisis de los siglos VIII al X.
Entre los libros de historia, es muy común etiquetar al periodo justo después de la caída del Imperio Romano de Occidente, como un periodo oscuro. Sin embargo, todo es pura generalización, hubo un renacer de la cultura que se dio en el reino franco, tanto en el periodo Carolingio, como Merovingio, teniendo a Carlomagno, como su principal monarca y valedor, creador además, de un régimen que duraría aún varios siglos: el sistema feudal. Sin embargo, lo creado por éste último monarca caería como un castillo de naipes. Por un lado la división del imperio por herencia entre sus dos hijos, creando lo que hoy es Francia y Alemania. Y por otro, la vampirización que el sistema feudal estaba sometiendo a los reinos centralizados era letal para el poder de todo monarca que se vio obligado a negociar y a concertar con sus nobles feudales, para entrar en guerras u otros asuntos de estado. Pero lo peor llegó con la llamada Segundas Invasiones Barbaras:
- Siendo la primera la musulmana, que barrería en el siglo VIII, imperios tan tradicionales como el persa, o amputaría grandes territorios al bizantino. El reino hispánico visigodo desaparecería por completo.
- La segunda oleada en el siglo IX, sería la invasión de los Magiares en centroeuropa.
- Y la tercera y última, la de los vikingos o normandos, con tres ramas: una sueca, que invadió rusia. Otra Danesa, que invadió sobre todo las islas británicas, y una noruega, que ocuparon Irlanda. Pero también ocuparon el sur de Italia, y parte de Francia, entre otros territorios.
La economía se resintió, pues volvió a ser insegura durante estos tres siglos. A ello, se le sumaría otra catástrofe, que sería, la extendida creencia del fin de los tiempos en el año 1.000, donde se daría lugar a mucha especulación y fraudes, a cuenta de los crédulos que vendieron sus bienes a precio de ganga, para liberar su alma de todo pecado.
- Crisis del siglo XIV.
Es esta una crisis, mucho más que económica, pues afectó a todo estamento, y a toda parte del sistema. Es incluso una crisis demográfica. Tras el periodo de esplendor del siglo XIII, donde nace el gran periodo de las catedrales, convergen como una tormenta perfecta varios factores que acabaron con la propia Edad Media:
- Crisis climática. La época de los Veranos Podridos. Un periodo de enorme pluviosidad, incluso en verano, acompañado de inviernos muy fríos, que hicieron tierras poco cultivables.
- Agotamiento de las distintas minas centroeuropeas.
- Crisis demográfica. La principal de todas, pues fue en éste siglo, la aparición, violenta, de una nueva enfermedad, nacida para arrasar poblaciones: la Peste Negra o Bubónica. Que se llevó en sus distintas oleadas, que tendían a ser cíclicas, unos 25 millones de europeos. Es decir, un tercio de su población, o entre un 30 % o un 60 %, según fuentes y lugares. Una de las consecuencias de las distintas epidemias, fue la muerte de religiosos y creyentes, que vieron como Dios no les protegía, por lo que la pérdida de poder de la Iglesia como estamento, y de fe en la religión, fue importante en un periodo en el que toda la población creía sin condiciones en las distintas facciones cristianas (católicas u ortodoxas).
- La Guerra de los Cien Años, interminable como su nombre indica, y desestabilizadora al extremo en la zona occidental europea. Pues aparte de Francia e Inglaterra, se vieron involucrados los reinos ibéricos, donde en la propia península iba a discurrir parte de la contienda, así como otros estados, como Flandes.
- Un cambio en la economía, pues el florecimiento de la cultura urbana dio lugar al crecimiento de la burguesía, que empezaba a tener más riqueza, y poder, en algunos sectores, que la vieja nobleza. Se empezaron a crear distintos Gremios, que venían a concentrar a los artesanos de un mismo sector. Desaparecía también el régimen de vasallaje, por lo que el señor feudal pierde influencia a favor de los distintos reyes.
Para no hacer una entrada demasiado larga, continuo la semana que viene con otra entrada, relativa al periodo moderno de nuestra historia, donde hubo otras grandes crisis que cambiaron el rumbo del mundo. Aquí ya veremos como dichas crisis ya empiezan a parecerse más a las nuestras, y se empiezan a hablar de términos similares a los actuales, como es el caso de la burbuja, inflación y demás.